Entrevista con Román Setton y Gerardo Pignatiello, editores de un nuevo volumen sobre el policial argentino

Esta casa editorial acaba de publicar El policial argentino en el período clásico (1930-1960) entre "Sur" y el peronismo, un excelente volumen de ensayos en torno al tema que será de mucha utilidad no solo para los especialistas sino para todos los lectores de la obra de Borges, Arlt, Casares y otros grandes escritores argentinos. Los doctores Román Setton y Gerardo Pignatiello, editores del libro, charlan con nosotros sobre el nuevo libro.

¿Cómo les surgió la idea de editar este volumen?

Román: Nosotros habíamos editado en 2016 un volumen de carácter histórico, si se quiere, sobre el género policial en Argentina: Crimen y pesquisa. Ese libro abarca desde las primeras producciones en el siglo XIX hasta textos y audiovisuales muy cercanos a la fecha de publicación del libro. Y comprende formatos y medios muy diversos del género en Argentina –ficción literaria, testimonio, televisión, cine, historieta– y también textos de carácter teórico ya no únicamente centrados en la Argentina, textos sobre literatura de enigma o literatura negra y sus vínculos con la historia literaria o las ideas políticas o las matemáticas. Entonces, después de un volumen tan amplio en sus pretensiones, nos pareció una buena idea centrarnos en el momento más candente del género en el país, una época en la que además hay dos factores centrales de la cultura argentina que van a modelar, al menos parcialmente, la historia del género: el peronismo y la revista Sur, con Borges como el principal defensor del género en ese momento. 
Gerardo: Por un lado, vimos que siempre se habla de ese momento de los años 30 hasta los 60 como un momento a esta altura clásico del género policial en Argentina que merecía una actualización crítica. Y por otro, la necesidad de pensar ese género tan popular en la literatura y el cine en relación con el momento político nacional más importante del siglo XX, como fue el surgimiento del peronismo. Es decir, poner en contacto dos fenómenos populares de esos años.
 
¿Qué vacíos explora este libro en la amplia literatura sobre el tema del género policial argentino?

Román: El volumen explora, en cierto sentido, la época más importante de la literatura policial y del cine policial y negro en Argentina, la época de los grandes nombres, Arlt, Borges, Bioy Casares, Peyrou, Walsh, Christensen, Fregonese, Tinayre, Saslavsky, Don Napy, entre muchos otros y, sin embargo, no existía hasta el momento ningún volumen que abarcara esta época del género, ni en la literatura ni en el cine. Además, es una época en que los vínculos entre la literatura y el cine son bastante intensos, con transposiciones de textos de Borges, de Bioy Casares, etcétera. Es sin duda el período de mayor popularidad tanto en el cine como en la literatura, es la época en que comienza a publicarse por ejemplo El Séptimo Círculo,  la colección de literatura policial que dirigieron Borges y Bioy Casares. Creo, en ese sentido, que el libro tiene el mérito de ofrecer una mirada abarcadora de la literatura policial –no sólo de los autores y textos más importantes, también de las traducciones y de las colecciones– y del cine policial y negro de la época, no solamente de las películas en sí, también de las transposiciones y en general de los vínculos que se dieron entre la literatura y el cine policial, por ejemplo, los encuentros y desencuentros entre las películas y las ediciones populares de literatura: se utilizaban para las tapas de los libros imágenes de las películas, se renombraban las novelas a partir de la celebridad de los films, se impulsaban autores cuyas obras recientemente habían estado en la pantalla.
Gerardo: El libro tiene la virtud de mirar el período de un modo muy actual, a la luz de la producción posterior del género y de nuevas lecturas críticas. Al mismo tiempo, la idea era mostrar no sólo las diferencias ideológicas entre Sur y el peronismo, es decir, entre la cultura liberal cosmopolita y la cultura nacional-popular, sino también los cruces, conexiones y continuidades propias de compartir época entre ambas manifestaciones de la vida nacional.
 
¿Por qué el interés de Borges y otros escritores argentinos por el género policial?

Román: El interés de Borges, entendemos, está vinculado con el carácter no realista del género. Con la multiplicación de reglas y limitaciones que el género proponía en ese entonces. Y, esencialmente, porque el género policial y la literatura fantástica le permitían realizar una apología del tipo de literatura que en ese momento él consideraba la literatura, es decir, una literatura de la trama y de la imaginación, tal como queda claro en un texto que escribieron con Bioy Casares “Modesta apología del argumento”. Borges, en ese entonces, tenía una suerte de disputa contra el costumbrismo y con la novela psicológica –tal como se puede ver, por ejemplo, en su introducción a La invención de Morel–. Y también había una gran preferencia por las formas breves, tal como se pude ver por su escritura. En ese sentido, el policial y el cuento fantástico se prestaban perfectamente para hacer esos meticulosos mecanismos de relojería que son los cuentos de Borges, son géneros que entonan muy bien con ese tipo de escritura. Por eso también el cuento policial y no la novela.
Gerardo: Y también es cierto, como demostró Raúl Horacio Campodónico en un capítulo del libro anterior que editamos, Crimen y pesquisa, que Borges escribe policiales y sobre literatura policial en un momento de explosión del género a nivel mundial y local. Campodónico hace un rastreo de la enorme cantidad de colecciones populares que se vendían en kioscos y que estaban dedicadas al género policial: había tanto escritores locales como traductores, sobre todo de policiales norteamericanos. Es decir que a partir de los años 30, en Buenos Aires sobre todo, había una gran producción de este género porque también había muchos lectores. Y el policial es sólo una de las formas de manifestación de la cultura popular, porque esa es también la época de auge del cine, del tango y de los movimientos políticos de masas como el radicalismo primero y el peronismo después.

¿Qué les gustaría que supieran los lectores sobre esta obra?

Román: Quizá aclarar que el libro abarca un poco más de lo que el título promete, pues hemos intentado comprender formas del policial no tan centrales en la época, formas no vinculadas por ejemplo con el grupo Sur, como son los relatos policiales de Arlt; también temporalmente abarca un poco más que el período, ya que incluye trabajos de Borges y Bioy Casares para el cine, como sucede con la película Invasión.
Gerardo: Claro y también van a encontrar el análisis de otros fenómenos que acompañan al crecimiento del género policial como la bonanza económica del primer gobierno de Perón, el desarrollo industrial, las traducciones, el rol de las secciones policiales de la prensa, entre otras cosas.